BRUSELAS — Finlandia se convirtió oficialmente en miembro de la OTAN el martes y pasa a engrosar las filas de la alianza de seguridad más grande del mundo.
La vecina Rusia ya advirtió que reforzará sus defensas cerca de la frontera que comparten si la OTAN despliega tropas o equipamiento adicional en el que ya es su 31er miembro.
El ingreso de Helsinki coincide con el 74to aniversario de firma del Tratado de Washington, que dio lugar a la Alianza, el 4 de abril de 1949.
Alarmada por la invasión rusa de Ucrania el año pasado, Finlandia solicitó su entrada en la OTAN en mayo de 2022, dejando atrás décadas de no alineamiento militar para buscar la protección del paraguas de seguridad de la organización. La vecina Suecia también presentó su candidatura, pero su proceso de ingreso podría demorarse unos meses más.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo Tampa aquí.
Turquía fue el último aliado en ratificar el protocolo de adhesión de Finlandia el pasado jueves. Entregará el martes sus documentos oficiales al secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en la reunión de ministros de Exteriores en Bruselas, explicó Stoltenberg.
“Es un momento histórico para nosotros. Para Finlandia, el objetivo más importante en esta reunión será enfatizar el apoyo de la OTAN a Ucrania mientras Rusia continúa su agresión ilegal”, expresó el ministro Pekka Olavi Haavisto en un comunicado. “Buscamos promover la estabilidad y la seguridad en toda la región euro-atlántica”.
El viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Alexander Grushko, advirtió que Moscú responderá fortaleciendo su presencia militar en la zona fronteriza.
“Fortaleceremos nuestro potencial militar en el oeste y en el noroeste”, declaró Grushko según la agencia noticiosa RIA Novosti. “En caso de un despliegue de fuerzas de otros miembros de la OTAN en el territorio de Finlandia, tomaremos medidas adicionales para afianzar la seguridad militar de Rusia”.
El anuncio surgió poco después de que los partidos conservadores recibieron un impulso en las elecciones finlandesas, privando a la primera ministra izquierdista Sanna Marin de otro período. Marin había promovido el ingreso de su país a la OTAN.
La decisión es un revés estratégico y político para el presidente ruso, Vladímir Putin, que lleva tiempo quejándose de la expansión de la Alianza hacia su nación.